¿Existe algún bolso más deseado que el Birkin de Hermès? Las famosas más chic lo llevan, lo vemos de diferentes pieles y colores, escuchamos rumores de listas de espera de incluso años, y no es que el bolso sea una ganga precisamente…

El nombre de este bolso viene de la actriz y cantante Jane Birkin por una anécdota. Viajaba ella en avión sentada al lado de Jean-Louis Dumas, por entonces presidente de la compañía, cuando se le cayeron los objetos que llevaba en el interior del suyo. El presidente entonces se ofreció a crearle un bolso a medida y así, a partir de un bosquejo diseñado por la propia actriz, nació el Birkin en el año 1984.

Los Birkin se hacen a mano y el proceso de fabricación dura unas 5 semanas. Vemos unas imágenes del proceso artesanal para la creación de uno de estos bolsos:

El interior es normalmente de piel de cabra y las piezas metálicas suelen ser de Paladio, aunque es posible personalizarlas con oro u otros metales, incluso se pueden añadir diamantes.

Existe una versión conocida como Shoulder Birkin, que fue diseñada por Jean Paul Gaultier para la temporada Primavera/Verano 2005, y que es más corto y con unas asas más largas para poder colgar el bolso al hombro. Más cómodo, sí, pero me quedo con el diseño del original.

Numerosos son los rumores de la lista de espara para conseguir un Birkin. Sin embargo, el libro de Michael Tonello Bringing home the Birkin, basado en su propia experiencia tras comprar 130 bolsos de este modelo a lo ancho del mundo, los desmiente.

Este bolso sí que es un auténtico «deseado», porque mínimo tenemos que ahorrar 6000 € para conseguir uno… y yo me pregunto ¿realmente merece la pena?